Poeta, ensayista, antólogo y bibliógrafo. Miembro de Número de la Academia Chilena de la Lengua y Correspondiente de la Real Academia Española.
Poemarios: Nos poblamos de muertos en el tiempo (1976); Alguien hablará por mi silencio (1978); Las horas en el tiempo (1979); En voz alta (1983); Las siete palabras (1987), traducida al portugués por el escritor José Afrânio Moreira Duarte y publicada en Brasil (2002); Poemas del amor joven (1989); A raíz de estar despierto (1995); Pedazos enteros (2000); Le doy mi palabra (antología oral, CD, Leutún, 2003). La pequeña eternidad (2004); En el centro de tu nombre (2004)
        Los autores de sus antologías son: Francisco de Quevedo, Fray Luis de León, César Vallejo, Gabriela Mistral, Juan Guzmán Cruchaga, Óscar Castro, Roque Esteban Scarpa, Fernando Duran Villarreal, Poetas chilenos contemporáneos, Manuel Bandeira, Joaquín Alliende, Humberto Díaz Casanueva, Eugenio Orrego Vicuña, Carlos Silva Vildósola, Julio Barrenechea.
       Premio Iberoamericano de Poesía (Belo Horizonte, Brasil, 2006).

PUEDE QUE EL TIEMPO DOS VECES NO PERDONE

Tú has querido defender

a tantos muertos, aunque demoraste

indefinidamente con los vivos.

En el fondo, nadie pudo

persuadirte de que la vida

era enormemente más que tus rutinas

y estuviste inclinado en pensar

que el mundo cabía en tu ventana.

 

La obra del vivir no se escabulle

y aprovechando el llanto de los vivos

comprendes por qué ahora

los muertos reclaman su consuelo.

Es tu hora tal vez, quizás la única

que pueda salvarte de imposturas.

No te creas demasiado feliz.